La obra de Joan Pla (Barcelona, 1941-2023) es fruto de una vocación tardía. A pesar de haber cultivado la fotografía desde su juventud –a los dieciséis años–, hasta pasados los cincuenta no decidió dedicarse a ella plenamente. Desde entonces ha perseguido captar con su cámara la poética del mundo que lo rodea.
Pla se deja llevar por la energía y la atracción inevitable de la belleza; busca una mirada sutil y sensitiva mediante el orden y la razón. En ocasiones, sus fotografías fragmentan y descontextualizan la realidad para reducirla a formas, volúmenes y texturas. A menudo se deja arrastrar por la danza sinuosa de las dunas, por la atracción inabarcable de los...