Stella Rahola Matutes reivindica la materialidad como sustancia permanentemente sujeta al cambio, bien a través de una implicación con seres humanos y no humanos y su manipulación, la interacción con su entorno o la vida dinámica de sus reacciones químicas. Esta cuestión implica políticamente considerar los procesos de fabricación y sus relaciones asociadas de poder, es decir, las trabajadoras, sus herramientas y los espacios de producción.
La exposición desarrolla estas ideas tomando como ejemplo la condición de transformación de un material como el vidrio y observando, en primer lugar, cómo se trabaja en un taller artesano. Se revelan, mediante cuatro artefactos,...